La Coordinadora contra Garoña de La Rioja, de la que forma parte CCOO, ha manifestado su más profundo rechazo a la posible reapertura de la central nuclear. Es una irresponsabilidad que el Consejo de Seguridad Nuclear haya informado favorablemente para que la central pueda operar hasta 2031 sin que la propietaria haya cumplido con las condiciones de seguridad necesarias.
La Coordinado ha convocado hoy una protesta frente a la sede del PP de Logroño, hasta donde han acudido disfrazados con trajes anti-radiación y pancartas en las que se podía leer ‘Garoña, desmantelamiento ¡Ya!’ para entregar herramientas que les permitan hacer más fácil el cierre de la central.
CCOO denuncia que se abre un peligrosísimo precedente al separar la seguridad de las centrales de la autorización para su funcionamiento e incrementar los riesgos intrínsecos a esta tecnología. Este proceder es, en opinión de este sindicato, absolutamente irresponsable, sobre todo cuando se quiere ampliar la vida útil de todos los reactores más allá de los 40 años.
Este nuevo movimiento del CSN corresponde a intereses políticos y empresariales. No obedece a necesidades técnicas, porque no se han acometido las exigencias que se requieren para una apertura segura, y tampoco a económicas, porque la energía nuclear no es barata. Tampoco supone seguridad energética, porque Garoña es una central muy pequeña, lleva desconectada desde 2013 y seguimos sin tener problemas con el servicio energético. Es, por tanto, un movimiento realizado para alargar la vida de todas las centrales hasta los 60 años y si algún Gobierno quisiera cerrarla tendrá que pagar un lucro cesante.
La explicación a la decisión del CSN se puede encontrar en el precio actual de la electricidad y en las previsiones de crecimiento futuras. En abril de 2016 Iberdrola, una de las propietarias de Garoña, cuestionó la posible viabilidad económica en el caso de tener que hacer las inversiones a las que le obligaba el Consejo de Seguridad Nuclear. En ese mes, el precio en el mercado mayorista era de 24,11 €/MWh (59,42 €/MWh en diciembre), nada que ver con los 101,9 €/MWh que se han fijado a finales de enero y que, sin duda, harán rentable invertir en una planta ya amortizada.
DEBATE SOCIAL
CCOO de Industria ha insistido en la necesidad de enmarcar el futuro de la energía nuclear dentro de un gran debate social, no solo político y tecnocrático, que defina qué modelo energético necesita (fundamentalmente renovables), cuál debe ser su papel y durante cuánto tiempo funcionará esta fuente energética con la tecnología actual. CCOO de Industria insiste en avanzar hacia ese modelo con una transición justa, es decir, económica, ambiental y socialmente sostenible. En el Reino Unido, Alemania o Francia ya existen decisiones, leyes y modelos en este camino.
Además, CCOO de Industria considera absolutamente imperativo reactivar el plan que se aprobó en 2009 y que establecía ayudas para la reactivación económica de la comarca burgalesa donde se encuentra Garoña por valor de cien millones de euros y que fue paralizado en 2012 por el Gobierno del PP.
