El mes de junio suele ofrecer datos favorables en el paro y la afiliación a la Seguridad Social, impulsados por el turismo y la hostelería, aunque el empleo creado siga siendo precario y de baja calidad.
Como todos los veranos en nuestra comunidad, empieza la temporada del empleo en el sector Servicios en Semana Santa y dura hasta septiembre, mes en el que baja el paro en la agricultura y continúan campañas temporales hasta llegar a Navidad. Esta temporalidad es la que hay que cambiar. Esta temporalidad es la que lleva a los parados y paradas en La Rioja a no cotizar ni tan siquiera para cobrar una prestación contributiva de desempleo, lo que nos conduce a unas cuotas de cobertura social del 48,50%, no llegando ni a la mitad de la población desempleada.
Nos alegramos de que muchas personas puedan empezar a trabajar en verano, pero queremos un empleo de calidad durante todo el año, que permita a los jóvenes emanciparse, a las familias vivir dignamente y a la sociedad riojana, crecer económicamente. Queremos cotizar para tener unas pensiones dignas.
Confiamos en que el nuevo Plan de Desarrollo industrial aprobado por el Consejo Riojano del Dialogo Social, con el trabajo y la implicación de todas las partes, nos permita cambiar estos datos de temporalidad y precariedad en La Rioja.
