Enfermeras y auxiliares de la Comunidad Autónoma han vuelto a concentrarse frente al Palacete del Gobierno Regional para denunciar la situación de desigualdad que padecen.
La situación, lejos de mejorar, está empeorando. En una última vuelta de tuerca al hermetismo del Gobierno regional hacia las reivindicaciones de las trabajadoras, ahora se impide al sindicato CCOO entrar en los centros para informar a enfermeras y auxiliares en sus puestos de trabajo.
Resulta llamativo que las direcciones de los tres centros hayan acordado limitar el acceso a CCOO con el respaldo de la Consejería de Políticas Sociales.
Somos un colectivo castigado físicamente, Nosotras también acudimos fajadas a trabajar. Actualmente hay varias trabajadoras auxiliares pendientes de cambios en sus puestos por motivos de salud y otras tantas pendientes de adaptación de sus puestos de trabajo por las mismas razones. Somos el colectivo que más adaptaciones y cambios de puestos de trabajo sufre de la Administración riojana.
CCOO tiene claro que esta situación se produce, principalmente, por tratarse de un colectivo mayoritariamente femenino y, por tanto, con escasa visibilidad e injustamente infravalorado. “Está claro que las casi 200 trabajadoras de la Comunidad Autónoma no son los suficientemente importantes para este gobierno”, señalan las trabajadoras.
El colectivo de auxiliares y enfermeras de la CAR continúa reivindicando con esta protesta el cumplimiento de los acuerdos firmados desde el año 2008 para su inclusión en el Seris, dónde se daría una salida laboral digna a las trabajadoras con problemas de salud y se daría una respuesta al crecimiento profesional. Teniendo en cuenta además, que se cuenta con el apoyo de las diferentes mesas y que la legalidad acompaña este proceso. No se entiende que se haya tardado 8 años en reconocer la viabilidad, solo cabe pensar en la injustificada discriminación a nuestro colectivo y la propia desidia de la Administración. Ésta es una decisión que, actualmente, está en manos de las Consejerías de Salud, Políticas Sociales y Función Pública.
Otro punto fundamental de las reivindicaciones es la petición de una baremación única de los méritos para evitar discriminaciones al personal sanitario de la CAR, que padece una absurda y dañina desigualdad en los procesos de acceso al Seris.
Se reclama también una subida de niveles progresiva, de hasta el 17 para las Auxiliares y el 23 para las enfermeras, y la creación de un Complemento de Movilidad del Paciente, el reconocimiento de los sábados como festivos, y las actualizaciones hora/nocturna tal y como existe en otras CCAA.
En estos momentos trabajar en el turno de noche, en solitario, con la responsabilidad que conlleva el cuidado de más de 30 pacientes se abona a 2.17 euros la hora. Estas medidas económicas servirían para compensar nuestro desajuste salarial y nuestras limitaciones de crecimiento profesional.
