Dos años después, es el momento de valorare el Plan de Formación y Empleo 2016-19 en el que los agentes sociales hemos participado y colaborado por primera vez con el Gobierno de La Rioja. Este plan de FP y Empleo, que impulsó el anterior Consejero de Educación y Empleo, estaba llamado a ser el referente en un nuevo escenario de diálogo social, hoy dos años después representa todo lo contrario a lo que el diálogo significa.
Lo que en su día acogimos con gran expectativa, ha supuesto a día de hoy, una demostración más de que el actual consejero de Educación y Empleo sigue dando la espalda a los problemas y, así, difícilmente se les podrá poner solución.
El propio Gobierno cifra en un 43% el grado de cumplimiento en lo relativo al Sistema de Cualificación y Formación Profesional, y en un escasísimo 18% el apartado de las Políticas Activas de Empleo. Estas cifras, que además no reflejan la realidad, preocupan especialmente cuando apenas queda un año para la conclusión del Plan.
En cuanto a los objetivos relacionados con la Formación Profesional, vemos cómo el Plan preveía aumentar de uno a cuatro el número de Centros Integrados de Formación Profesional. A día de hoy sigue habiendo sólo uno y ni siquiera hay un plan integral para abordar la puesta en marcha del resto. Aun así, cómo existe uno de los cuatro previstos, el cumplimiento se cifra en el 25%.
Se planteó también, como objetivo, el acceso de toda la población activa a las competencias clave para salir del desempleo. La realidad es que han participado menos personas que antes de la puesta en marcha del Plan. Y no se han querido aprovechar los recursos que tienen los agentes sociales en esta materia.
Apostamos también en su día por la promoción de la Formación Profesional en redes sociales y conseguir 1.000 usuarios entre las personas más jóvenes. Una propuesta que no sólo ha sido abandonada sin dar explicaciones.
Por otro lado, los objetivos con peores resultados son los relacionados con las Políticas Activas de Empleo.
Las Políticas Activas de Empleo PAE y los Servicios Públicos de Empleo SPE no crean empleo por sí solos, pero son imprescindibles porque actúan sobre la población trabajadora para que se mantengan en el empleo o para que salgan del paro.
Se planteó el incremento del número de agentes de empleo local, pasando de los siete originales a diez. A día de hoy no hemos avanzado y continúan siendo siete, sin embargo, los indicadores reflejan un cumplimiento del 70%.
Otro de los objetivos prioritarios era abordar el problema del paro de larga duración. Dos años después, sólo se ha alcanzado a un 18% de los parados, menos que en 2015, antes de la puesta en marcha del Plan.
Se pretendía ampliar el número de entidades colaboradoras en materia de formación, partíamos de 6 en 2015. A día de hoy sólo hay cuatro. Como el objetivo planteado era de diez, los indicadores reflejan un cumplimiento del 40%.
En definitiva, la valoración del Plan evidencia una clara falta de voluntad política por parte de la consejería de Educación y Empleo, a la que pedimos desde CCOO un cambio de rumbo cuanto antes.
Tenemos la intención de trasladar este análisis del Plan de Formación y Empleo 2016-19 a los grupos parlamentarios con el objetivo de que conozcan nuestras posiciones y propuestas.
“El diálogo social debe ser abierto y constante, y esto parece que le cuesta entenderlo a la consejería de Educación y Empleo”, concluye Jorge Ruano, secretario general de CCOO en La Rioja.
