Las trabajadoras y los trabajadores nos concentramos a las puertas de nuestras empresas y ayuntamientos para expresar públicamente nuestra solidaridad con las víctimas de la DANA. Trasladamos nuestras condolencias a las familias y amistades de las personas fallecidas, a las que acompañamos en su dolor.
Mostramos todo nuestro apoyo a quienes han perdido su casa, su coche y enseres, ven peligrar su trabajo o la viabilidad de su negocio. Instamos a todas las administraciones públicas a movilizar los recursos necesarios para la protección del empleo, la actividad económica, el cuidado y el alojamiento de las personas afectadas.
Agradecemos los esfuerzos de los diferentes servicios de emergencia y de atención que están actuando para paliar las consecuencias del desastre, reforzar los servicios públicos es garantía de protección de las personas. Reconocemos la muestra de humanidad de las innumerables personas voluntarias que están contribuyendo a limpiar las zonas afectadas.
Consideramos que en estos momentos es imprescindible un compromiso político coordinado para la reconstrucción de los daños, la reparación y el progreso de nuestra sociedad bajo los principios democráticos del Estado de derecho. Pero no olvidamos la necesidad de hacer justicia con las víctimas, momento habrá para pedir transparencia sobre lo sucedido, exigir las responsabilidades que se deriven y las soluciones que eviten en un futuro consecuencias tan dramáticas como las padecidas.