Tristemente tenemos que volver a concentrarnos para dar visibilidad a un nuevo accidente mortal en La Rioja. Lamentamos profundamente el accidente de ayer en las obras del antiguo colegio de Adoratrices de Logroño donde parte del edificio en remodelación se derrumbó dejando a dos trabajadores heridos y a otro fallecido.
Trasladamos nuestras condolencias a familiares, amistades, compañeras y compañeros de trabajo y vamos a realizar un minuto de silencio para dar visibilidad a este trágico accidente mortal.
Exigimos una rigurosa investigación de lo ocurrido, que esclarezca los hechos, para quienes tengan que asumir las responsabilidades, que las asuma.
Y dada la situación de vulnerabilidad de los trabajadores accidentados y fallecido, exigimos la actuación inmediata y urgente de la fiscalía. Un accidente laboral no solo acaba con la vida de una persona, sino que deja destrozadas las vidas de sus amistades y familiares. El drama de esta familia empieza hoy.
Este año los accidentes de trabajo en jornada graves se han incrementado un 71% y los mortales del 400%. Y para que estas cifras se reduzcan de manera continuada y significativa, es necesario continuar dando impulso a la mejora de las políticas de prevención de riesgos laborales.
Hemos echado en falta que el programa electoral del nuevo gobierno riojano no realice propuestas más concretas para abordar un problema de salud de primer orden como es el de los accidentes de trabajo en España. Y les recordamos que es vital que las actuaciones previstas en los planes de actuación de la Estrategia Española de Seguridad y Salud en el Trabajo se pongan en marcha sin más demora.