CCOO quiere analizar la situación de las empresas industriales que se ubican en las comarcas de Alfaro, Calahorra, Arnedo y Cervera, y las consecuencias del efecto frontera y la repercusión en el empleo de algunos de los municipios de la zona.
El hecho de tratarse de un territorio colindante con Navarra una comunidad con un régimen fiscal específico, hace que numerosas empresas se hayan planteado en los últimos tiempos desplazar sus sedes, originalmente riojanas, para poder acogerse a los beneficios que ofrecen. De hecho, algunas han materializado ya ese traslado, con la importante pérdida que eso supone para el tejido social, económico e industrial de esta zona de La Rioja.
Ante esta realidad, en los próximos días vamos a mantener una reunión con los representantes de CCOO en empresas de la zona, para valorar la situación en cada una de ellas y las posibles alternativas a los problemas que están aflorando. Problemas que en ningún caso se limitan a una empresa o sector, si no que afectan al conjunto de todos los sectores industriales de las comarcas.
Más si cabe, cuando tenemos en estos momentos encima de la mesa la negociación de un Plan Industrial con el Gobierno regional, plan que, en opinión de CCOO, debe abordar también estas cuestiones.
El mantenimiento de la actividad industrial en las comarcas de La Rioja Baja, como en todo el resto de la Comunidad, debe ser sin duda una prioridad de cara a mantener la economía y el empleo en esta tierra frente a la fuerte competitividad que impone el efecto frontera.
Esa será en todo momento la lucha de CCOO desde el punto de vista del interés colectivo de La Rioja y en defensa de su tejido industrial desde un punto de vista global.