Los despidos de interinos en los meses de junio de 2013 y 2014, conllevaron en La Rioja, como en muchos otros lugares, un auge en las movilizaciones de mareas y plataformas en defensa de la educación pública. Algunas fueron organizadas, otras surgieron de forma instantánea y, a la cabeza de muchas de ellas, Mikel Bujanda, uno de los más conocidos activistas en esta materia en Logroño.
En concreto, una de las protestas le hizo enfrentarse en 2014 a una sanción de 580 euros por no contar con los permisos necesarios. Bujanda siempre ha defendido que no fue una movilización organizada sino «un llamamiento para que todos los interinos acudiesen el mismo día al INEM, que derivó en una protesta espontánea».
No era la primera vez, también había sido sancionado con 300 euros en noviembre de 2011. Una multa que, tras ser recurrida, no tuvo que pagar.
Su participación en la protesta que llevó a cabo la Plataforma en defensa de la Educación Pública coincidiendo con las carrozas de San Mateo en 2014, también le hizo responsable a ojos de la Delegación del Gobierno.
Ahora, dos años después, y tras haber presentado diversos recursos, ha recibido una nueva respuesta. La cuantía se ha rebajado. No tendrá que pagar la cantidad inicial de casi 600 euros sino 190. Es la cifra que establece para este tipo de faltas la Ley de Seguridad Ciudadana, más popularmente conocida como ‘Ley Mordaza’.
La administración le hace ver que esto juega en su favor ya que se le está aplicando «la ley más favorable» a su caso. Sin embargo, el sindicalista no tiene ninguna intención de pagarla y seguirá recurriendo. «No nos van a callar, seguiremos luchando por la Escuela Pública», afirma. Recuerda además que «en La Rioja tenemos otros dos compañeros que se enfrentan incluso a penas de cárcel por su participación en la manifestación con motivo de la huelga general del 14N» y hace un llamamiento a seguir trabajando «a pesar de la represión».
