Los últimos datos del paro ofrecidos hoy por el Ministerio dejan al descubierto la feminización y alta temporalidad del paro en La Rioja. De los 16.930 parados en nuestra comunidad, el 58,83% son mujeres.
Los datos del colectivo “sin empleo anterior”, en el que se suman los parados en busca de su primer empleo con las personas paradas de larga duración, hacen visibles la dificultad de las mujeres para acceder al empleo o para su reincorporación al mundo laboral. Las mujeres ocupan el 76,93% del total de este colectivo. Esta realidad se agrava con el aumento de la edad: las mujeres mayores de 30 años representan el 51,80% de las personas paradas sin empleo anterior.
Si a este dato le sumas la poca diferencia entre los y las desempleadas menores de 25 años, tramo en el que incluso hay 18 mujeres paradas menos que hombres, nos deja la imagen de que si la mujer quiere trabajar, tiene que ser joven. Se sigue penalizando a la mujer por ser mayor y por tanto, por no ajustarse a los cánones de belleza asociados a la juventud y por aumentar la posibilidad de ser madre.
Por sectores, la mayor concentración de parados está en el sector servicios y la industria. El 97% de los contratos registrados en abril ha sido temporal, el 89% de los registrados durante el año, también. Y pese a la tan nombrada Ley de la Renta Ciudadana, seguimos con una cobertura social para las personas desempleadas por debajo del 50%.
Poco mejora el empleo en La Rioja. Nos podríamos alegrar de que llega el buen tiempo porque con eso desciende el paro, pero estructuralmente no se está mejorando nada, incluso estamos retrocediendo.